Conjunto de procedimientos clínicos basados en una técnica, realizados con el objetivo de obtener una parte representativa medible a partir de un todo, una pequeña alícuota o espécimen biológico del paciente o del medio ambiente. Esta puede ser líquida o sólida.
CARACTERISTICAS DE UNA MUESTRA CLÍNICA
Debe alcanzar un volumen cuantitativamente razonable.
Debe ser representativa del lugar donde se localice la patología. Debe ser tomada del lugar específico de la lesión.
Debe ser cualitativamente óptima para su estudio.
Debe ser en la mayoría de los casos de emisión resiente.
Debe obtenerse cuando el paciente está atravesando determinadas instancias evolutivas de su patología.
Debe obtenerse respetando los criterios anatomofisiológicos.
Deber estar correctamente embalada, evitando recipientes inseguros que potencialmente puedan producir contaminación accidental.
Debe enviarse inmediatamente al laboratorio para su estudio, o si tiene que transcurrir algún tiempo, será almacenada en recipientes especiales o en medios de cultivo de transporte.
Debe obtenerse con material esterilizado y en condiciones de asepsia.
CLASIFICACION DE LA TOMA DE MUESTRAS
Podemos clasificar la toma de muestra en tres grupos: Muestras superficiales. Muestra de cavidades. Muestras especiales.
Consideraciones generales para tomar muestra Debemos saber:
QUE vamos a tomar como muestra: esputo, sangre, orina, etc.
POR QUE vamos a tomar la muestra (fines de diagnóstico, investigación).
COMO vamos a tomar la muestra (punción, raspado, etc).
DONDE vamos a tomar la muestra (vena, faringe, piel, etc).
CUANDO vamos a tomar la muestra (pico febril, ayuno, etc).